Puedo afirmar con rotundidad que la mejor forma de conocer
realmente a las personas es ponerlas de golpe ante una situación chocante e
inesperada… Y observar sus reacciones. Punto. Con eso basta y sobra.
Si el protagonista es uno mismo, tanto mejor. Porque aparte
de estudiar cómo responde dicha persona ante un estímulo desde un punto de
vista muy próximo, obtendrás información muy valiosa del concepto que en el
fondo tiene sobre ti.
Llevaba yo dándole vueltas a esta teoría ya unos días, y
buscando una manera adecuada de crear una situación a medio camino entre lo
transgresor y lo mínimanente aceptable. Algo que jamás pudiese revestir el más
mínimo riesgo, pero que no pasase desapercibido en absoluto.
Pues anoche se me encendió la bombilla, y decidí poner en
práctica un experimento social.
Esta mañana, antes de entrar en mi oficina a trabajar,
decidí dejar los zapatos en el coche. Iba a quedarme descalzo durante todo el
día, como si fuese lo más natural del mundo. Y por supuesto, iba a abrir los
ojos y a afinar los oídos.
Y este fue el resultado:
-Una compañera me preguntó si iba así como una forma de
transgredir o protestar, y a continuación ella solita empezó a soltar un
discurso sobre la necesidad de rebelarse, de plantar cara al poder, etc etc. LA REBELDE
-Otra persona me dio una charla sobre lo sanísimo que era
andar descalzo para la circulación, para la temperatura corporal, etc. EL
PRACTICO
-Un compañero disimuló su enorme sorpresa de forma muy
diplomática y me dijo, intentando ser natural, que tuviese cuidado de no
pincharme o golpearme. EL DIPLOMATICO
-Otro compañero estaba covencido de que lo hacía para que me
tuviesen por desequilibrado y dejasen de mandarme tareas. Aplaudió mi
iniciativa, y despotricó contra la oficina, los jefes, la organización del
trabajo, etc. Luego me hizo fotos para mandárselas a un compañero que estaba de
vacaciones. EL QUEMADO
-Dos compañeras me preguntaron en voz muy alta, para que
todo el mundo se enterase: Niñooooo!!!!!!!! Dónde has dejado los zapatos? Por
qué vas descalzoooooo!!??? LAS COTILLAS
-Dos compañeros no dijeron anda, pero se miraron el uno al
otro para comentar la situación cuando yo no estuviese. LOS COMPLICES
-Una compañera se quedó totalmente bloqueada, sin poder
reaccionar. Tenía miedo de hacer o decir cualquier cosa inadecuada. LA POLITICAMENTE
CORRECTA.
-Un compañero miró con mala cara varias veces pero no se
atrevía a decirme nada. Luego escuché que podía haber ido a contárselo a los
jefes. EL JEFECILLO
-Una compañera se rió al principio, pero luego se quedó
buscando un sentido más profundo y trascendental a mi descalzamiento. LA ANALIZADORA
Como conclusiones del experimento, extraigo:
1)La gente utiliza los problemas de los demás para expresar
sus deseos, ideas, frustraciones y pensamientos más profundos. LA REBELDE-EL QUEMADO-EL
PRACTICO-LA ANALIZADORA
2) Los problemas ajenos son una excelente forma de
comunicación y de unión entre las personas. LOS COMPLICES-LAS COTILLAS-EL
JEFECILLO-EL QUEMADO
3) Las personas que más se ciñen a las normas establecidas
suelen ser las más incapaces de reaccionar ante una situación inesperada. LA POLITICAMENTE
CORRECTA-EL DIPLOMATICO-EL JEFECILLO
4) La mayoría de personas que se interesan por tus problemas
no lo hacen para ayudarte, sino para satisfacer su curiosidad: La gente me
preguntaba por qué iba descalzo, yo contestaba que me había dejado los zapatos
en casa, querían saber cómo y por qué, pero no me ofrecían soluciones.
Heme aquí!
Heme aquí!

Jo chico, que buen experimento, y que encorsetados estamos los seres "humanos",
ResponderEliminarpor cierto ¿cual fue tu solución?
Es muy divertido Rick. Me gustan los escritos que te dejan con la sonrisa en la cara. Como relato corto da la talla. Perfecto.
ResponderEliminarMe parece genial tu experimento.. y para colmo me he visto a mí misma entre la cotilla y la politicamente correcta.. ains.. y no me gusto.. Tu experimento me vale para aprender a conocerme un poco más.. y ahora.. etiquetame!!
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